Muchos ya sabemos que la aplicación de la Toxina Botulínica ayuda a la reducción de arrugas, eleva las cejas y en general mejora la apariencia de la piel, pero sabías también que es usada para tratar la migraña, espasmos faciales, tics nerviosos, entre otros.
Además, según una publicación de la revista Time, la Toxina Botulínica sirve para curar otros problemas de salud como la depresión, problemas del corazón, disfunción eréctil y sudoración en las manos.
Resultados naturales que dependen de la técnica de aplicación que utilice, expertos emplean la técnica de multipuntura con baja dosis, logrando de esta manera que el resultado sea más natural.
Mejorar la expresión del rostro: el buen uso y la buena aplicación de la Toxina Botulínica ayuda a mejorar la expresión facial pues reduce arrugas y líneas de expresión, además con una adecuada técnica, genera un efecto lifting sobre la piel, haciendo que se reafirme y se reduzca la flacidez.
No es un relleno. La Toxina Botulínica trabaja reduciendo la fuerza de la contracción del músculo y no rellenando las arrugas. Su efecto dura aproximadamente de 5 a 7 meses y es totalmente reversible; pasado este tiempo la piel vuelve a ser la misma de antes.
-En general genera reducción de arrugas en la frente
-De arrugas en el entrecejo
-También de arrugas en el cuello producidas por las bandas de platisma
-Arrugas en la nariz
-Mejorar el contorno de ojos
-Eleva las cejas, la punta nasal y la comisura bucal
-Depresión
-Problemas del corazón
-Migrañas
-Distonías
-Disfunción eréctil
-Dolor de espalda
-Sudoración excesiva
-Evitar los masajes en el rostro
-No aplicarse compresas de frío y calor
-Evitar acostar en las 4 horas siguientes de la aplicación
-No usar casco o gorras
Origen del bótox: algunos dicen que viene del veneno de una araña o serpiente, en realidad la Toxina Botulínica es un neuromodulador purificado extraído de una bacteria que al ser purificado y en las dosis cosméticas recomendadas por los expertos, no produce ese efecto.
De igual manera, lo más recomendable es acudir con un experto para que nos guie en el procedimiento.